Aguanto día a día lo que me toca, acuesto mi alma en un rincón, descubro que la vida es otra cosa, sin el mi alegría se escapó. Volverlo a ver es mucho más de lo que pido, sus fotos ahora me miran y me ven vacía, quisiera volverlo a abrazar, decirle que no me puedo conformar, pero seguramente me está mirando como yo lo miraba cuando crecía.